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viernes, 31 de agosto de 2012

Cabo de Palos: submarinismo, barcos hundidos y gastronomía en la costa de Murcia





Coronado por su imponente faro, de 81 metros de altura sobre el nivel del mar, en la costa de Murcia, a solo 3 kilómetros de la Manga, está el pueblo marinero del Cabo de Palos. Con su costa abrupta, sus numerosos restaurantes en el paseo junto al puerto para comer la especialidad de la zona, arroz al caldero, o cualquiera de los platos de la estupenda gastronomía de la zona, y con unas aguas ricas y protegidas por su biodiversidad, conserva su encanto pese al turismo. El centro de la vida social lo constituye su pequeño puerto pesquero y deportivo, donde aún puedes ver cómo los pescadores preparan sus pequeños barcos y redes antes de hacerse a la mar y  regresar con el pescado fresco que luego se sirve en las mesas de los buenos restaurantes de la zona como Miramar, La Tana, La Taberna del Puerto o El Mosqui. Tras descender del faro puedes regresar al Puerto caminando por el lado más abrupto, que conduce por pequeñas y bellísimas calas a través de una pequeña senda con pasarela de madera que sirve de salida al mar a las viviendas de la zona, y desde la cual existen estrechas escaleras para acceder a las calas; o bien descender por el lado que conduce a las más grandes playas de Cabo de Palos, las de Levante, que cuentan con paseo marítimo y son de fácil acceso. La cercanía de la alguna del Mar Menor ("palus" en latín) es la que da nombre al lugar. El litoral forma parte de la Reserva Marina de Cabo de Palos e Islas Hormigas y cuenta con calas solitarias para disfrutar de aguas transparentes y otras con un ambiente más animado pero igualmente apetecibles. Las Islas Hormigas son muy frecuentadas por buceadores, por su fondo marino de gran riqueza, y en 1906 provocaron el naufragio de un barco italiano lleno de emigrantes.
Esponjas, erizos, cabrillas, lisas, salmonetes, gambas, langostas y meros hacen su vida bajo el agua junto a los restos del "Sirio" y de otros buques ya que el Cabo de Palos es donde existe la mayor concentración de barcos hundidos del Mediterráneo. En Cabo de Palos se organizan cursos de buceo durante todo el año, gracias al clima cálido del sudeste murciano, y salidas en barco que atraen a buceadores de toda España. Su faro, de 1865, ha sido declarado "Bien de Interés Cultural". Según los historiadores Plinio el Viejo y Avieno, sobre el promontorio del cabo hubo en la antigüedad un templo consagrado a Baal Hammon, identificado luego por los romanos como Saturno.En el siglo XVI, en el reinado de Felipe II se construyó sobre el promontorio una torre vigía para defensa de la costa contra los habituales ataques de los piratas berberiscos. No obstante, la torre renacentista fue demolida y sus sillares se utilizaron en la construcción del actual faro. Como curiosidad hay que asistir, si se está por allí, el Jueves Santo a la procesión del Cristo de los Pescadores que recorre el pueblo y en la que el objetivo principal es demostrar la estrecha relación que existe entre los pobladores de Cabo de Palos y la mar. Los cofrades, que son más de doscientos, lucen vestuarios que combinan el amarillo y el azul, colores con los que se intenta evocar el sol y el mar, los dos elementos naturales que han forjado la personalidad de este pueblo.
Está situado a 31 kilómetros de Cartagena, municipio al que pertenece, por la autovía MU 312, y a 71 km de Murcia por la autovía A-30. Al sur se encuentra Cala Reona y la sierra minera de Cartagena con espectaculares paisajes de vegetación mediterránea, mientras que al norte está La Manga del Mar Menor. Cala Reona es larga y ancha, y su arena fina, dorada, mullida y abundante, despejada al sureste, y cerrada al oeste por los acantilados del Atalayón que se sumergen en el mar, a excepción de punta Lobo y la Cueva de las Palomas. Y a solo una media hora de Cala Reona se encuentran las maravillosas calas del Parque de Calblanque. Hay que subir un repecho pizarroso y dejar atrás acantilados negros donde planta sus nidos el águila perdicera, la rapaz más emblemática del parque, y calas vírgenes como la llamada Dorada o de los Dentoles. Cala Tunez, Cala Fría, Cala Roja, Cala La Galera, Cala Las Escalerillas, Cala Botella, Cala Las Melvas, Cala Avellan, Cala Medina, Cala Flores, son algunas otras de las que encontramos bordeando la costa de Cabo de Palos

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